BEATA BERTA
3 de agosto
1163 d.C.
Nació en Florencia, o en el castillo de Vernio, en el seno de la
familia Alberti (a menudo llamada erróneamente de Bardi); era
hija del conde Lotario Alberti. Ingresó jovencísima en el
convento vallumbrosano de Santa Felicita en Florencia donde
destacó por su santidad; en 1153 el general de los
vallombrosanos, Gualdo Gualdi, la mandó a gobernar y reformar el
convento de Santa María de Cavriglia (Arezzo).
Berta se trasladó a este nuevo lugar y durante su gobierno
refloreció espiritual y numericamente el monasterio, con una
mayor observancia de la Regla. Después de 16 años como
abadesa, tuvo la percepción de su pronta muerte; reunió a
la comunidad y las exhortó, por última vez, que
parmenecieran unidas en la oración y en la caridad. Su cuerpo se
encuentra hoy en la iglesia parroquial de Cavriglia y es patrona de
este pueblo y de Montano. Se fundaron dos Congregaciones de ambos
sexos, con el fin de perpetuar su culto y memoria y todavía
existen.