BEATO BERNARDO DE ROQUEFORT
1242 d.C.
29 de mayo
Es un rostro de la Inquisición
muy diferente de lo que estamos acostumbrados a escuchar mencionar que mostró
el dominico Guglielmo Arnaud y sus diez compañeros mártires
muertos el 29 de mayo de 1242 en la región de Avignonet, cerca de
Toulouse. Su historia está históricamente ubicada en el período
de disputas con los albigenses. William y sus compañeros fueron el
Tribunal de la Inquisición que el Papa Gregorio IX había establecido
para tratar el tema. El día de la Ascensión, el gobernador
de Avignonet invitó a los religiosos a un enfrentamiento con los albigenses.
Pero resultó ser una trampa: los once fueron golpeados hasta la muerte.
Las crónicas nos dicen que murieron cantando el Te Deum y proclamando
esa fe que habían venido a defender. En el nombre de estos mártires,
los milagros florecieron y su culto continuó a través de los
siglos. Finalmente fue Pío IX en 1866 quien lo aprobó oficialmente.
(Avvenire).