Conocido como
Bautista Mantuano; "El humanista más santo y el santo de los
humanistas". Nació en Mantua. Estudió primero en su
ciudad natal y después frecuentó varias universidades
llamando en todas partes la atención por su inteligencia, y por
su inspiración poética. Siendo muy joven, después
de haberse salvado de una epidemia de peste, ingresó en la
congregación Mantuana (que era una especie de reforma pero
dependiente del Padre General de la orden carmelitana) de Ferrara, en
la que hizo su profesión religiosa en el 1464. Fue ordenado
sacerdote en Bolonia (1470) y en su universidad recibió el
magisterio en Teología en 1475.
Por su inteligencia
y por sus virtudes se ganó la confianza de sus superiores que le
encomendaron graves empresas: desempeñó varios y
delicados cargos como prior de varios conventos (Parma, Mantua y Roma),
maestro y definidor hasta que llegó, en el 1483, a ser elegido
Vicario general de toda la congregación, siendo después
reelegido por cinco veces consecutivas hasta que en el 1513 fue elegido
Prior general de toda la Orden. Extendió la Orden y luchó
para que la observancia regular se viviera en toda ella con gran
florecimiento. Tomó parte en varias comisiones y empresas
pontificias en el Concilio V de Letrán. En favor de su orden
escribió "Apología de la Orden Carmelita". En pro
de la Iglesia escribió varios tratados y muchas poesías
defendiendo a los Papas y a la misma Iglesia, contra los que la
atacaban. En 1513 el Papa León X le encomendó la delicada
misión de paz entre el rey de Francia y el duque de
Milán.
Tuvo gran amistad
con los hombres más famosos de su tiempo, y a muchos les atrajo
a una nueva conversión entre ellos a Juan Pico de la
Mirándola. Escribió más de 50.000 versos y de las
materias más diversas, siempre para llevar almas a Cristo. Fue
sin duda alguna uno de los humanistas más ilustres y más
conocidos de su tiempo y como alguien dijo: "hizo servir a Cristo su
prodigiosa vena poética". Se dedicó intensamente a la
oración a la que dedicaba varias horas al día y nadie ni
nada lograba posponerla. Escribió, todavía novicio, a su
padre que trataba de disuadirle de la vida que acababa de abrazar: "Si
deseas saber qué es lo que hacemos y a qué dedicamos
nuestro día te lo diré en una sola palabra: ORAMOS". Se
le llamó “Virgilio Cristiano”. Fue uno de los más
célebres humanistas, especialmente por su obra "Bucólica
seu adolescentia in decem aeglogas divisa"; de las que se cuentan
cerca de 150 ediciones. Influyó en los literatos ingleses como
Shakespeare, A. Barclay, E. Spenser y J. Milton. Lutero y los
protestantes quisieron tomarle como uno de los precursores de su
reforma, pero la distancia entre ambas posiciones es muy grande.
Murió en Mantua lleno de méritos. El 17 de diciembre
de 1885 su culto fue confirmado por León XIII.