BEATO ANTONIO SAEZ DE
IBARRA LOPEZ
1936 d.C.
22 de septiembre
Fr. Antonio
Sáez de Ibarra y López de Arcaute nació en Hijona,
provincia de Álava, el 25 de marzo de 1914; lo bautizaron al
día siguiente y le pusieron el nombre de Ruperto. Siendo
aún niño sintió la vocación franciscana y
respondiendo a la misma pidió la admisión en la Orden de
Hermanos Menores. Hizo los años de postulantado en el convento
de Estepa (Sevilla), y el 17 de enero de 1931 vistió el
hábito franciscano en el noviciado de Lebrija (Sevilla),
cambiando su nombre de pila por el de Antonio. Debido a la quema de
conventos que tuvo lugar en mayo de 1931, se vio obligado a interrumpir
su noviciado; más tarde, con dispensa apostólica y
supliendo los días perdidos, pudo finalmente hacer su
profesión simple el 26 de agosto de 1932.
Seguidamente lo enviaron al Colegio de Nuestra
Señora de Regla en Chipiona para hacer los estudios de
filosofía. Debido a una grave enfermedad de la garganta, y para
que pudiera continuar ejerciendo el servicio del canto litúrgico
que tanto amaba y en el que era verdaderamente brillante, por consejo
de los médicos lo trasladaron al convento de Fuente Obejuna. Ya
recuperado y cuando se disponía a regresar a Chipiona lleno de
ilusión por continuar su formación y llegar al
sacerdocio, le sorprendió la persecución religiosa de
julio de 1936. Dios lo llamaba a dar el más alto testimonio de
amor. Pronto fue apresado y sin razón martirizado con los
demás frailes del convento el 22 de septiembre de 1936, en
Azuaga (Badajoz), cuanto tenía 22 años de edad y llevaba
4 de vida religiosa.