1994 d.C.
12 de mayo
Don Álvaro, como lo
llaman millones de personas de todo el mundo que utilizan su intercesión,
fue un brillante estudiante de ingeniería cuando conoció a
San Josemaría Escrivá. Al darse cuenta de que Dios lo llamaba
por ese camino, pasó a formar parte del Opus Dei en 1935. Ordenado
sacerdote en 1944, una vez que terminó sus estudios civiles y eclesiásticos,
fue el principal colaborador de San Josemaría y se convirtió
en su sucesor al frente del 'Opus Dei en 1975. En Roma, donde vivió
desde 1946, fue muy apreciado, entre otras cosas, por el trabajo que había
realizado durante el Concilio Vaticano II (1962-1965), ayudando a realzar
el papel de los laicos en la Iglesia .
Debido a su bondad y humildad, muchas personas de todas las clases sociales y condiciones le tenían un gran afecto. Álvaro del Portillo murió en Roma el día después de una peregrinación a Tierra Santa, el 23 de marzo de 1994. El mismo día, Juan Pablo II fue a rezar ante sus restos mortales. Fue beatificado el 27 de septiembre de 2014 en Valdebebas. Su memoria litúrgica está programada para el 12 de mayo, el día de su primera comunión.
Debido a su bondad y humildad, muchas personas de todas las clases sociales y condiciones le tenían un gran afecto. Álvaro del Portillo murió en Roma el día después de una peregrinación a Tierra Santa, el 23 de marzo de 1994. El mismo día, Juan Pablo II fue a rezar ante sus restos mortales. Fue beatificado el 27 de septiembre de 2014 en Valdebebas. Su memoria litúrgica está programada para el 12 de mayo, el día de su primera comunión.