BEATO ALDEBRANDO DE
FOSSOMBRONE
1 de mayo
1247 d.C.
Nació en Sorrivoli en Cesena, o en Romagna, también en
Cesena y otros dicen que no dentro de los límites del municipio
y diócesis de Cesena, sino en la zona de Sarsina-Galeata.
Estudió en la colegiata de Santa María de Porto en
Rávena y fue ordenado sacerdote en Rímini, donde se le
conoció por su valerosa posición en contra de inmoralidad
en las costumbres; fue elegido preboste de la catedral de Rímini
(1222-1228). Su franqueza en el hablar, denunciando todos los males de
su tiempo, y reivindicó algunos bienes del Capítulo de la
catedral, que estaban en posesión del Ayuntamiento de
Rímini, el pueblo, soliviantado por los patarinos locales, se
levantó en su contra, que le obligó a huir de la ciudad.
Con esta experiencia se retiró buscando la soledad fuera de
Rímini.
En el camino al exilio, se encontró con los nuncios del
Capítulo de la diócesis de Fossombrone (Pesaro) que iban
a Rímini, para presentarle el nombramiento de obispo de esta
localidad. Aldebrando no tuvo dificultad y aceptar el encargo y en el
1228 tomo posesión del obispado de Fossambrone, donde
llegó a ser un perfecto maestro de la doctrina y celador de la
pureza de la fe. Construyó la catedral de esa diócesis.
En su Vita cuenta que una vez le
llevaron una perdiz cocinada para obsequiarsela, como el estaba
haciendo ayuno, oro sobre el ave y esta recupero la vida y voló.
Su cuerpo se encuentra en la catedral de San Maurenzo.