DAVID
Vocabulario bíblico
David es una de las figuras
más relevantes e influyentes de la historia de Israel. Muy biwn dotado
como estratega militar y como político, culminó la conquista
de la tierra prometida, sometiendo definitivamente los enclaves cananeos
que todavía sobrevivían, tanto en el sur (Jerusalén)
como en el norte (Meguido-Tanac). Se puede decir que en David se cumplió
la promesa de la tierra hecha a Abraham. David extendió sus dominios
sobre los pueblos vecinos, llegando a crear un reino con cierta importancia
polírica dentro del área.
Como persona, como rey y como iniciador de una dinastía,
David ha seguido una trayectoria siempre ascendente a lo largo de la historia
bíblica, hasta convertirse en el prototipo del Mesías, el futuro
rey ideal, que debe nacer de su sangre. Los dos libros de Samuel lo describen
con todo el atractivo de un héroe de leyenda: hermoso de presencia,
fiel en la amistad, justo y noble con los enemigos, hombre de estados, poeta
y músico.
Pero la grandeza de David es, sobre todo, de orden religioso.
Su piedad y virtudes religiosas se ponen de manifiesto en el respeto con
que trata a Saúl por el "ungido del Señor", en la traslación
del arca, en su deseo de construir el templo, y en el respeto hacia los profetas,
los sacerdotes y demás instituciones sagradas.
La tendencia a idealizar a David alcanza su culminación
en la Historia del Cronista que evista cuidadosamente todo lo que pueda suponer
deshonra para el gran rey.Con la figura de David se asocian la elección
de Jerusalén como capital del reino y la permanencia de su disnastía
como depositaria de las promesas mesiánicas. De este modo el binomio
"David-Sión" viene a sumarse al de "Moisés-Sinaí", centro
de los antiguos artículos de fe.